Después de los excesos de las fiestas navideñas o del verano nos hacemos los mismos propósitos. Tras unas “duras” fechas en las que es difícil hacer algo de ejercicio y en la que es demasiado fácil excedernos en nuestra dieta nos planteamos deshacernos de esos “kilitos” que antes no estaban. ¿Es posible? ¿Podré hacerlo? Pues claro que sí. Solo es necesario un poco de voluntad, algo de constancia y motivación y profesionales que te orienten.
¿QUÉ PUEDO HACER?
Frente al peso podemos plantearnos hacerle frente o bien con dieta o bien con ejercicio o por qué no con ambas soluciones simultáneamente
DIETA
Como ya sabrás las dietas milagrosas no existen, el tomar determinados productos (por mucho que se puedan anunciar en televisión) no te va a garantizar conseguir los resultados esperados. Tampoco es útil copiar la dieta de tu amiga o descargarte alguna que puedas encontrar en Internet. Cada persona es un caso y lo ideal es hacer un estudio personalizado para poder diseñar la dieta ideal y así conseguir reducir de manera eficaz esos kilos que nos “sobran”. Las dietas no implican pasar hambre, ni mucho menos, sino que son pautas que nos harán comer mejor y de forma más saludable con el apoyo, en ocasiones, de elementos nutricionales que nos ayudarán a cumplir nuestro objetivo. Por supuesto, lo que es básico es contar con un Nutricionista que nos pueda realizar un asesoramiento nutricional personalizado.
EJERCICIO
Para los que el gimnasio, o el running (tan de moda últimamente) no es su pasión, también es posible realizar actividad física de otra forma como ya comentamos en otro post a través de la plataforma vibratoria y podemos complementar nuestra dieta con tratamientos como la termoterapia, presoterapia, láser lipolítico, etc …
Como puedes ver tienes todas estas herramientas a tu disposición y si tienes ganas sólo falta empezar. ¿Empezamos?
