Las quemaduras y escaldaduras son accidentes frecuentes. Saber actuar ante ellas es importante para mejorar el pronóstico de las lesiones que producen.
¿Qué quemaduras son las más serias?
Las quemaduras se catalogan (según los daños que provocan) en grados. Las de primer grado son las que afectan a la capa externa de la piel (las típicas quemaduras solares, por ejemplo). Si afecta a más del 50% de la piel del cuerpo o destruye la epidermis llegando a capas más profundas, se dice que es una quemadura de segundo grado o segundo grado profundo. Si destruye la epidermis y también la dermis (pudiendo llegar al hueso), se trata de una de tercer grado.
Algunas quemaduras se curan en solo unos días
Las típicas lesiones al quemarse con una plancha suelen ser pequeñas y basta con aplicar agua y tapar la quemadura con gasas estériles. Eso sí suelen ser dolorosas por lo que se puede tomar paracetamol para aliviar el malestar. Las lesiones provocadas por el sol que suelen escocer pero no dejan ampollas ni vesículas, se curan solas sin dejar cicatriz en una semana.
Si las quemaduras son en la cara, el cuello o la zona genital es mejor no taparlas con una venda. Pero en el resto del cuerpo es mejor ponerla (sin apretar demasiado) para evitar roces. Así se aleja el riesgo de que la lesión se infecte y se garantiza una pronta recuperación.
Quemaduras con líquidos
El agua caliente o el aceite pueden provocar lesiones de segundo grado (la piel se ve brillante y salen ampollas). Que duela mucho indica que no es muy profunda.
Si la ropa no se ha pegado a la piel, hay que retirarla y poner agua para enfriar la zona. Si no es grande, se puede curar en 7-10 días dejando una mínima cicatriz.
Para acelerar la cura o aliviar, después de lavar la lesión se puede aplicar una crema corticoide tópica, un apósito graso o cualquier tipo de crema hidratante.
Cuándo conviene acudir al médico
En los casos de lesiones de primer y segundo grado, solo convendría ir al médico si el dolor al cabo de los días no remitiese ni con analgésicos. Sin embargo, siempre hay que ir al médico si la quemadura es extensa o profunda. Es el caso de las que dejan una lesión de color rojo oscuro o blanquecino o de las que casi no duelen (eso indica que se pueden haber destruido las terminales nerviosas). Las de aspecto blanco perlado o carbonizado (típico de las quemaduras por electricidad, productos químicos o irradiaciones) suelen necesitar injertos de piel.
Cómo actuar con las quemaduras de químicos o fuego
Lo primero que hay que hacer siempre es eliminar los relojes, pulseras, anillos y cualquier adorno que podría agravar la quemadura.
Los pasos a seguir inmediatamente
Elimina la ropa quemada o impregnada de sustancias tóxicas o cáusticas, siempre que con ello no corras el riesgo de retirar un trozo de piel. Refresca la que-madura con agua limpia o suero fisiológico frío. En el caso de quemaduras con productos de limpieza es especial-mente importante lavar la piel con abundante agua para eliminar el producto. No apliques nunca pasta dentífrica y tapa la herida con gasas estériles. Si la quemadura es grave acude después al médico para que evalúe la lesión.
No toques las ampollas
No las pinches ni las abras para sacar su contenido porque el tejido muerto sirve de caldo de cultivo a los propios gérmenes cutáneos y se puede infectar. Si la quemadura es reciente puedes cubrirla con un apósito graso que no apriete.