Cuatro alimentos fuente de calcio
Cuando pensamos en qué tipo de alimento podemos consumir que nos provea calcio, el que primero nos suele venir primero a la mente es la leche.
Pero a continuación veremos que existen varios otros alimentos que pueden beneficiarnos aún más que los lácteos proveyendo calcio a nuestro cuerpo sin causar efectos dañinos.
Ajonjolí
El ajonjolí o semillas de sésamo es quizá uno de los alimentos con mayor cantidad de calcio dentro de los vegetales. Contiene 975 mg de calcio por cada 100g de ajonjolí.
Por esta razón comer ajonjolí diariamente ayudará a tener muy buenas reservas de calcio y así evitar enfermedades relacionadas con la deficiencia de este mineral. Se puede consumir de muchas maneras, en panes, mezclado con alguna bebida o junto a los cereales, entre otras.
Almendras
Las almendras son otro alimento rico en calcio. Contiene 250 mg de calcio por cada 100 g de almendras, por esta razón son muy beneficiosas en especial si se consumen por medio de extractos también conocidos como, por ejemplo, la «leche de almendras”.
Alimentos de hojas verdes
Los alimentos de hojas verdes (acelga, espinaca, nabo, etc.) son realmente unos grandes portadores de calcio, aportan significativas cantidades de calcio al organismo, además de otros nutrientes que son importantes para nuestra salud.
Podemos consumirlos crudos, cocidos al vapor o en extractos. De igual manera las leguminosas tales como las lentejas, judías, frijoles (especialmente los negros aportan 103 mg de calcio por 1 taza de frijoles cocinados), garbanzos, entre otras, aportan cantidades importantes de calcio a nuestra dieta.
Frutas
Las frutas son otra fuente de calcio, si bien no contienen calcio en grandes cantidades, el calcio que contienen se asimila muy fácilmente.
Entre las frutas que más calcio aportan se encuentran los higos secos (10 higos aportan 269 mg de calcio aproximadamente).
Hábitos que promueven la absorción del calcio
Ejercicio
El practicar algún tipo de ejercicio o tan solo salir a caminar unos 30 minutos al día es de gran beneficio, ya que permite que el calcio circundante en sangre se fije en los huesos y estos puedan fortalecerse de manera adecuada.
Sol
La luz solar activa en nuestra piel la vitamina D que es indispensable para la absorción y fijación del calcio en los huesos. Es suficiente con tomar sol unos 15-20 minutos para pieles claras y de unos 20-30 minutos para pieles más oscuras.
Es importante recordar que debemos tomar el sol antes de las 9:00 de la mañana y después de las 4 de la tarde para evitar que los rayos dañen nuestra piel.
Por esta razón, para poder tener una buena salud incluyendo nuestra salud ósea, es importante que comamos de manera variada y equilibrada. Asegurémonos de tener siempre en nuestra dieta: frutas, verduras, leguminosas y cereales integrales, así como de practicar ejercicio y recibir luz solar de forma moderada.