Si eres de los que va al gimnasio en coche para subirse a una bicicleta estática es el momento de cambiar. Un estilo de vida saludable que te permita estar más sano se asienta sobre unos pocos pilares básicos: entre ellos, tener una vida más positiva, ser una persona activa y seguir una dieta equilibrada.
La salud es un concepto subjetivo y no todos tenemos la misma idea de lo que es estar sano. Para unos, la salud es simplemente la ausencia de enfermedad. Para otros, estar sano tiene mucho más alcance, como se recoge en la definición de salud que hizo la OMS hace más de 50 años. Según esta definición, Salud es el estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades. Como objetivo puede resultar un tanto utópico, pero es una buen referente para intentar mejorar. ¡Manos a la obra!
¿España tiene buena salud?
La esperanza de vida en España es de las más altas del mundo con 82,8 años (85,6 en mujeres y 80,0 en hombres). Pero, esto no quiere decir que no podamos hacer más para mejorar nuestra salud.
Una breve radiografía sobre la salud de la población española:
– De los 46,7 millones de habitantes, el 24% de los mayores de 15 años es fumador.
– El consumo de alcohol por persona y año se sitúa en los 11,4 litros, lo que supone un consumo medio en comparación con el resto de países de nuestro entorno.
– Un 53,7% de la población española mayor de 15 años presenta exceso de peso: el 17% presenta obesidad (Índice de Masa Corporal>30) y el 36,7% tiene sobrepeso (Índice de Masa Corporal entre 25 y 30). En cuanto a la actividad física, el 46,7% de la población mayor de 15 años practica actividad física (al menos 30 minutos al día con intensidad moderada o intensa).
– Los estudios sobre depresión señalan que el 4% de la población española ha padecido depresión en el último año.
Claves para estar más sano
Una vida saludable es aquella que permite vivir más años con una buena calidad de vida. La forma más fácil (y barata) de fomentar la salud no es a través de un sistema sanitario basado exclusivamente en la curación, sino a través de la prevención.
Unos hábitos de vida saludables nos permitirán alcanzar el máximo umbral de salud de acuerdo a nuestra disposición genética.
Dieta
Las principales recomendaciones para tener una dieta más sana son:
– Consumir 5 raciones diarias o más de verduras, hortalizas y frutas.
– Consumir legumbres de 2 a 4 veces por semana.
– Disminuir el consumo de carnes y embutidos.
– Consumir 4 raciones de pescado por semana.
– Utilizar mayoritariamente aceite de oliva, para cocinar y aliñar.
Hábitos saludables
Dejar de fumar supondrá una inmediata mejora de la salud. De igual modo, moderar el consumo de alcohol supondrá una mejora en nuestro estado de salud y la disminución del riesgo de padecer enfermedades.
Positividad
El bienestar y la salud mental son igual de importantes que la salud física, incluso, en muchos aspectos, la salud física depende de la salud y el equilibrio mental. De ahí que tener una actitud positiva y saber relativizar los contratiempos de la vida cotidiana puede ser una manera sencilla de posicionarnos mejor en el mundo.
Para ello, una buena práctica puede ser la meditación y los ejercicios mentales que nos hacen ser conscientes y aceptar nuestro momento actual sin juzgarnos. Estas prácticas han mostrado ser antídotos efectivos frente a formas comunes de aflicción psicológica (obsesiones, ansiedad, temor, enfado, desmotivación, etc.).
Actividad física
La evidencia científica muestra que la actividad física moderada diaria mejora la salud. Mejora el sistema cardiovascular, la tensión arterial, el sistema metabólico, la salud ósea y el estado de ánimo.
Se recomienda realizar treinta minutos o más de actividad física moderada de forma habitual, al menos 5 días a la semana. Caminar media hora al día puede ser una actividad suficiente para notar los beneficios.
Por otro lado, no olvidemos que para poder llevar una vida activa debemos contemplar unos adecuados hábitos de descanso. Una correcta pauta de descanso se relaciona con una mejor salud y con menor riesgo de enfermedad. Dormir de 7 a 9 horas debe ser nuestro objetivo diario.